Gustavo Rosas

Juventud

Me sorprendí a mi mismo, varias veces durante la semana, diciendo “ya estoy muy viejo para esto”. Tengo 43 años y conozco personas mayores a mí, pero mucho más jóvenes que yo… Con la muerte de Carlos Fuentes ha habido muchas referencias a su obra y a sus expresiones, ayer escuché que citaban su respuesta a un entrevistador cuando le preguntaba si no estaba ya demasiado viejo para escribir, a lo que él contestó: “eso es relativo, tengo 80 años pero tengo una amiga intelectual de 92 años que tiene más lucidez que usted y yo juntos… en la actualidad necesito ser más joven cada día o de lo contrario me lleva la chingada”.

Actualmente vivimos más años y podemos conservarnos sanos más tiempo físicamente, sin embargo está muy generalizado que nuestras emociones y nuestra actitud envejezcan mucho más rápido que nuestro cuerpo, muchos adultos de entre 30 y 50 años deambulamos con una apariencia de cierta juventud que no concuerda con nuestro comportamiento avejentado; escuchamos a muchas personas decir que ya nada puede cambiar y les creemos, pensamos que a pesar de nuestros esfuerzos todo va a seguir igual, cada día nos sorprendemos menos de las maravillas de la vida, nos resignamos a nuestro infortunio, añoramos lo que pudo pasar o lo que ya no hicimos, cada días somos jóvenes más viejos. Fernando Delgadillo tiene una canción que dice: “te haces viejo cuando piensas que ya nada puede cambiar”. Totalmente cierto; mi abuelo decía que “la cana engaña” y yo digo que nos engañamos cuando se nos olvida que mientras sigamos adquiriendo nuevos hábitos y aprendiendo cosas nuevas, mientras sigamos soñando y provocando cambios, mientras cuidemos nuestro corazón y nuestro espíritu tanto como nuestro cuerpo, mientras sigamos bromeando a pesar de los problemas, mientras conservemos una cierta insensatez hacia lo que podemos lograr, mientras conservemos nuestra capacidad de asombro y querramos entender y entendernos más, conservaremos la juventud.

La juventud no es un pretexto para la inconciencia o para la equivocación irresponsable, la juventud es una capacidad de las personas que entienden que sólo conservando la juventud se puede transitar por esta vida siendo un factor de cambio.

Ánimo, que cada nuevo día seas más joven que el anterior.

Gustavo Rosas Goiz
Sígueme
Últimas entradas de Gustavo Rosas Goiz (ver todo)
Gustavo Rosas Goiz
Lo mío es contar, por eso cuento lo que se cuenta. Lo que sé: cuenta.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *